Una de las sorpresas musicales que nos trajo el pasado 2013 fue la vuelta a la música de Marilia Andrés Casares, la que fuera cantante en los 90 de Ella Baila Sola, formación que cuenta con ser el dúo femenino más vendedor en nuestro país. "Subir una montaña" es el título de su primera y esperada propuesta en solitario: Un disco que, sin ningún tipo de artificios ni grandes celebraciones, se ha convertido en uno de mis imprescindibles. Como era de esperar, ya que estamos hablando de una de las compositoras y voces que más me gustan.
13 años habían pasado desde el último disco "Marta y Marilia" y 12 desde su última gira. Entonces ya la escuchamos cantar en solitario por primera vez en el disco "Hay que volver a empezar". Luego se marchó a Los Ángeles, compuso mucho, tocó también, escribió para otra gente, colaboró en algún que otro disco, probó con otros proyectos diferentes a la música....y lo que le faltaba era grabar un disco con sus canciones. Siempre se rumoreó mucho sobre su vuelta, siendo el rumor más fuerte en el 2006 cuando se habló de un disco que estaba a punto de salir. Lo cierto es que Marilia vio el momento en el 2012 cuando escribió la canción "Subir una montaña" y ésta fue la que le dio el impulso a querer compartir sus temas con el público. Llegaron los 8 temas más que completarían el álbum, y Marilia, deseosa de querer probar nuevas formas de hacer música, se marchó a Londres a terminar de darles forma con músicos que ella misma buscó a través de anuncios. Luego presentó el disco con banda en esta misma ciudad, y de ahí, vuelta a España, donde no ha parado de tocar en directo los temas de este "Subir una montaña", del que ella ha tomado las riendas desde un primer momento, tanto en producción, grabación, edición y promoción. Asi se nos presenta la nueva Marilia.
"Subir una montaña", la canción, fue el origen de todo, el tema que marcaría el regreso a los escenarios de Marilia. Es una acústica simple y sencilla, pero de las que emocionan, que habla de autoafirmación, del momento de plenitud de una persona que ya encuentra la felicidad en sí misma. Así se muestra Marilia en cada uno de sus nuevos temas, mucho más directa que en su anterior etapa, pero más sabia y madura, tratando de nuevo temas cotidianos y cosas que suceden a su alrededor como en "Señoras" acerca de lo importante de huir de los cánones establecidos y de ser feliz sin necesidad de cumplir con lo que nos han marcado en la sociedad, del mismo modo que en "Marilyn y Supermán" se contenta con la persona que ama, sin que ésta tenga que ser perfecta. "Una tarde con Clint" habla, sencillamente, de ir al cine a ver una peli de Clint Eastwood, y "Mi perro" está dedicada, precisamente a él, a su perro. De todo esto, Marilia hace sencillas, pero atractivas canciones, con aires countries y hasta más rockeros en "Casi me rindo".
Espero que Marilia haya vuelto para quedarse mucho tiempo, porque es muy especial todo lo que la rodea. Desde antes de que saliera el disco, ya estaba presentándolo en conciertos, y así sigue, haciendo que suene cada vez más y el eco vaya in crescendo. De momento, le está yendo bastante bien, y esperemos que así siga y nos regale en un tiempo un segundo álbum.
Lo mejor: Su vuelta en sí ya es un regalazo, y si a esto le unimos temas sinceros y honestos, el resultado no puede ser mejor. La esencia de este disco está en su sencillez, en que es Marilia tal cual.
Lo peor: Excesivamente corto! 9 temas, los 9 que Marilia siente que tenían que estar, pero además son canciones que duran 2 o 3 minutos, que es lo que parece que se pretendía con este estilo, pero me han sabido a poco.
Temas a destacar: "Casi me rindo", "Subir una montaña", "Una tarde con Clint", "Señoras", "Marilyn y Supermán", "Una luz".
Frases a destacar: "Y todo lo que me perdí por no saber vivir lo estoy recuperando", "Quiero encontrar dentro de mí lo que esperado siempre fuera", "En un mundo en el que parece más fuerte quien no duda, ser diferente pasa factura. Quieren que sea una más, que sólo quiera gustar", "Y si bajas al parque con tu bebé radiante, tan feliz que nadie puede afectarte", "Casi se me olvida que hay más gente como yo", "Casi me conformo con lo que esperan otros de mí".
Nota que le doy: 9, 20. Os puede parecer una nota muy alta para un disco tan sencillo, que para algunos resultará soso e insípido, pero es que son canciones en las que hay que ver más allá, que enganchan con el tiempo, y que a medida que se escuchan se descubren cosas nuevas. Lo esperé y lo deseé mucho tiempo; siempre quise tener algo de Marilia en solitario. Y para nada me ha defraudado, siempre supe que los tiros irían por ahí. Felicidades.
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