"Cuando una siente que el tiempo se le rompe y que sus manos no son lo suficientemente fuertes para reconstruirlo, lo único que le queda es la fuerza de la palabra y de la música como bandera. Una bandera que una corazones, voces, gente, para que poco a poco ese tiempo roto se vaya curando". Así comenzaba el texto escrito por Ainhoa Cantalapiedra para su segundo disco, "Mi tiempo roto", un título que todos entendimos se refería a la poca vida de su anterior disco, cuya promoción y gira se vieron interrumpidas por el accidente de tráfico. Ainhoa quiso entonces recuperar el tiempo perdido con este disco, lanzado en Octubre de 2004. Aunque, de nuevo, un nuevo accidente la puso en boca de todos como "la gafe".
Pablo Pinilla produjo este disco, cuyas letras son en su mayoría de Ainhoa, y encontró un estilo en el que la cantante parecía sentirse cómoda, un pop-rock bastante duro y agresivo, lejos de aquel primer disco de búsqueda y en el que primaba la disparidad de estilos. "Seguiré estando yo" llamó la atención desde un principio, por sus poderosas guitarras y su letra oscura, de lo mejorcito del disco y de su carrera en general. Hay otras canciones interesantes como "Mi oportunidad", "Siempre amanece" o "En silencio", claras reminiscencias de lo que es el disco: Un canto optimista y potente, de superación, de búsqueda de nuestro sitio, tras haber pasado por momentos duros, y otros cantados desde la más profunda rabia, por las injusticias del mundo.
"Mi tiempo roto" pasó un tanto desapercibido; la discográfica no apostó mucho por él, y pareció más un disco hecho por compromiso de contrato. Pero, esto no estuvo reñido con su calidad, bastante superior a la del anterior, aunque el público no pareció encuadrar del todo a Ainhoa en el rock, ni en imagen ni en estilo. Todo esto, unido a que ya nos encontrábamos en el momento "anti-triunfitos", en el que ya las radios no querían artistas que identificaran con el manido programa de televisión, a pesar de que hicieran excepcionales trabajos. Una lástima, porque pudo haber dado mucho más de sí, y "Seguiré estando yo" era todo un single en potencia.
Lo mejor: Siento debilidad por este estilo, y creo que va muy bien con su voz y fuerza. Las letras son interesante, y muestran que Ainhoa dotes para escribir tiene. Su mejor álbum.
Lo peor: Ainhoa canta muy bien, y quizás el fallo de este álbum es que su voz no se explotó al máximo, se quedó muy cómoda en el mismo tono, pudiendo haber hecho más subidas y giros.
Temas a destacar: "Seguiré estando yo", "Tengo que aprender", "Mi oportunidad", "Siempre amanece", "Es mi juego", "Cristales rotos", "En silencio".
Frases a destacar: "Perdona por no comprender a tus fantasmas del ayer, sombras de un mundo gris del que tienes que salir", "Hoy no sé cómo areglar mi tiempo roto, yo lo guardé creyendo que no era el momento", "Tengo que confiar, lo volveré a intentar, y si al final me duele, lucharé para ser como siempre, leal a lo que siento", "Que hay muchos que dicen tanto, burlándose de otros tantos, y mira quién fue a hablar".
Nota que le doy: 7, 75. Se trata de un muy buen disco, muy digno, de una joven artista pop-rock, y es una pena que la gente no la viera así. Ahora ya sí que es tarde, dado la imagen que se ha creado: La de una mujer que da una pereza increíble, más que nada porque siempre sale dándole vueltas a lo mismo: a sus accidentes que fastidiaron su carrera, los pólipos por lo que no fue a Eurovisión, "la mano negra" que no le permite triunfar y varias historias más...Talento tenía, y en discos como éste lo dejó plasmado.
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